ILUSTRACIONES, FRASES Y DECANTACIONES

Coleccionista. 
 
No quiero asustarte. Estoy en un limbo. Sueño que tomo la bicicleta y recorro la costa, un hilillo azul que se pierde, se confunde. Lola (mi perra) me ladra, se hecha a correr detrás de mí, sale de un cuaderno de dibujo, de una página amarillenta, con sus trazos de lápiz B Fber Castell. Amaba coleccionar lapices, dibujar árboles, gaviotas. 
 
Coleccionaba hojas secas, panfletos, hierva de los jardines. Recuerdo que un vez estuve en un jardín cerrado en París, cerca de la Torre, trepé por la cerca, me escabullí entre las flores y el pasto húmedo, la Police merodeaba, pero estaba oscuro. Metí un puñado de tierra y hojas algo húmedas en una bolsita, como no tenía casi dinero para comprar llaveros y la torre en miniatura, me traje un pedazo de un jardín de París. Sueño que corro por calles infinitas, nunca me canso, nunca paro, no tengo sed, mis pies arden, no quiero parar. Al despertar es otra cosa, no flexiono mis pensamientos, es mejor dormir. 
 
 EL INSOMNE.   
 
El mundo es plano. Las personas son burbujas que el viento arrastra. Lola en el sueño es una guardiana, conoce mis secretos, me rodea mientras camino con la bicicleta a un lado. El sol cae y nos baña dulcemente. El sol de los sueños es solo un presentimiento de color, me imagino que es el sol pero realmente esa imagen de sol es antigua, desgastada, quiero profundizar en el recuerdo y veo pasar páginas de libros, páginas de internet, dibujos, ilustraciones del sol. El sol desaparece, la imagen que tengo del sol desaparece, y queda la luz por todas partes. El otro día vi un documental de un hombre insomne, cada día que pasaba dejaba de dormir un poco más y entusiasmado con la idea de no dormir y hacer más cosas, empezó a grabar todo, los sonidos, los olores, los sabores, los colores, las experiencias, grababa su vida entera, y la de su hijo. Creo que finalmente después de terminar el documental se durmió y fue como morirse, placentero, escurridizo, se abandonó simplemente. Y eso porque estar despierto era un placer, el descubrimiento constante, el asombro. 
 
La escritura, en fin.
 
Claro que puedo escribir. Escribo frases cortas y largas que no tienen musicalidad. Los dejo dentro del blog, en un apartado digitalizado que dice "entrada" y que no publico. La musicalidad es el sentido que esconde el poema. Lo que te reinvindica secretamente. Busco el éxtasis que sentía al leer a Bolaño, Canetti, Lispector, Poe, Yourcenar, por primera vez. Es posible que no regrese nunca allí. Escribo por el éxtasis. Y cuando desaparece un poco de ese éxtasis me pregunto si tiene sentido seguir escribiendo. Algún día los papeles del mundo se quemarán y las computadoras se comeran las palabras, ya no quedará el testimonio escrito, solo la palabra arrojada al viento, dicha por una única vez. Quizá por eso escribimos, para no ser polvo. 


 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Con los dedos

Paralelepípedo: A veces puedo verme en ti cuando hago ecuaciones.

CRÍTICA LITERARIA CON DIBUJOS: