sábado, 23 de mayo de 2015

TE NOMBRARÉ ENTRE MIS LIBROS

 Te nombraré entre mis libros
Borges
Cortázar
Nabokov
Dickinson
Bataille
mi amor

creeré por esta vez
en el fuego de los dragones
que escapan de tu espalda

no te dejaré
en el jardín de letras
fumando mates

seguirás tú
al poema

mi cama
si quisiera fugarme
seras tú mi sueño

te bañaré
tus cabellos
tu cuerpo
ya no será necesaria
la palabra
un poema de amor

no será necesario
escondernos

porque la guerra 
no habrá fulminado
tus ojos
que se encontrarán con los míos

todo tendrá sentido
yo no me iré a España huyendo
        de la utopía
tú no te irás a la Argentina
buscando la utopía

las luces se apagarán
como en el teatro
y entonces
podré nombrarte entre mis libros
mi amor.


Kissin - Rachmaninov Piano Concerto No. 2 in C minor, Op. 18 (full)







"Ella me amaba

pero todo estaba hecho

para perecer".

miércoles, 20 de mayo de 2015

LAS FLORES EN TU RETRATO



Simplemente yo te cortaba. No sabía hacer el amor. Las flores continuaban creciendo desde el piso de abajo. Vendame con tus manos. No era suficiente chupar tu clítoris, delicadamente, dulcemente. Las flores se enredaban a la ventana. Besar tu retrato. Pasan ferias de libros, exposiciones, ventas de garage. Creía rebelarme a través del callado orgasmo. La lluvia hacía crecer las flores, olía a muerte, dulcemente. Tus dientes, tu saliva, el dolor de tu vientre, la axila derecha, los vellos creciendo hacia tus piernas: describía de memoria el recorrido de la caricia. Sigo: tu teta suave, el lunar en tu cadera, tu cadera, las uñas sin cortar, la pierna, la hoja de tu pierna, mi estómago en tu brazo, mi pierna enredada a tu muslo erizado. Te cortaba y escribía encima de la cama, en los closet, en los baños vacíos y húmedos, en los comedores sin hambre. No quise viajar, caminar y la lluvia se quejaba en la noche, no quería oírla. Vendame con tu cuerpo, este cuerpo frío, que ya no tiene madre, ya no tiene vientre acuoso (lugar del mundo y del cuerpo). Y las flores crecían detrás de los edificios, desde abajo, en las ventanas de los pisos y el tiempo era el tiempo, nada más.

QUÉ SUCEDE

  A Josephine, mi otredad Qué sucede cuando sientes una conexión tan intensa que el otro se va, cuando se sienten los corazones latir en las...